Nadie vendrá en tu ayuda.
Nadie te ofrecerá apoyo, ni armas, ni herramientas, salvo las que debas encontrar tú mismo. ¿Podrás resolver el misterio del Monasterio? La lluvia cae con tanta fuerza que pica, y los relámpagos iluminan las ventanas oscurecidas del decrépito monasterio ante el que te encuentras...